Libros de Lewis Carroll

Una selección curada con cariño para explorar lo mejor de Lewis Carroll. Próximamente añadiremos recomendaciones automáticas y rutas de lectura.

El juego de la lógica — Lewis Carroll

240 páginas ~4h 30min

Carroll, siempre amante de los acertijos, propone aquí un libro tan juguetón como riguroso: una introducción a la lógica formal convertida en entretenimiento literario. Con diagramas extravagantes, ejemplos llenos de humor británico y paradojas que parecen sacadas de un sueño, transforma el razonamiento en un juego de imaginación pura. Una obra ideal para quienes disfrutan pensando… pero también para quienes disfrutan perdiéndose en el pensamiento.

La caza del Snark — Lewis Carroll

96 páginas ~1h 45min

Un poema narrativo de locura controlada, donde un grupo de personajes absurdos (marineros, banqueros, barberos y más criaturas improbables) parten en busca de un ser imposible: el Snark. Carroll convierte la aventura en un espejo deformado de nuestros miedos y deseos, un viaje donde las palabras importan tanto como aquello que esconden. Humor negro, fantasía y un final tan enigmático que sigue desconcertando a lectores y críticos.

Alicia a través del espejo — Lewis Carroll

240 páginas ~4h 30min

El segundo viaje de Alicia multiplica la extrañeza: hablamos de un mundo regido como un tablero de ajedrez, donde cada paso la acerca a convertirse en reina. Poesía burlesca, criaturas que solo existen cuando se las recuerda, juegos lingüísticos y uno de los finales más enigmáticos de la literatura infantil. Una aventura que demuestra por qué Carroll sigue siendo un genio del nonsense.

Fantasmagoria y otros poemas — Lewis Carroll

144 páginas ~2h 40min

Carroll en estado puro: versos traviesos, fantasmas educados, criaturas ofendidas y juegos métricos que mezclan humor absurdo con elegancia poética. Esta colección revela el lado más experimental del autor, que convierte la métrica victoriana en una fiesta de ingenio y precisión.

Alicia en el país de las maravillas — Lewis Carroll

192 páginas ~3h 40min

La obra que cambió la literatura infantil para siempre. Alicia cae por la madriguera hacia un mundo donde las reglas cambian con cada frase y donde la lógica es una trampa deliciosa. Criaturas inolvidables, diálogos brillantes y una imaginación desbordante convierten este libro en una obra maestra que sigue sorprendiendo incluso en la adultez.

El hombre que amaba a las niñas. Correspondencia y retratos — Lewis Carroll

480 páginas ~9h

Un volumen peculiar que reúne cartas, testimonios y retratos del autor, revelando el carácter complejo y contradictorio de Carroll. Un documento fascinante para quienes buscan comprender la mente detrás de Alicia: su afán por la precisión, su humor retorcido, su timidez extrema y su sensibilidad para observar el mundo infantil sin condescendencia.

Silvia y Bruno — Lewis Carroll

392 páginas ~7h 30min

Una obra singular donde Carroll mezcla sátira social, fantasía y drama humano. La historia avanza entre dos mundos —uno real, otro mágico— que se influyen mutuamente. Aunque menos conocida que Alicia, contiene algunos de los pasajes más audaces y emotivos del autor.

Aventuras subterráneas de Alicia — Lewis Carroll

128 páginas ~2h 20min

El manuscrito original de lo que más tarde sería *Alicia en el país de las maravillas*. Aquí la imaginación aparece en estado primitivo: más breve, más directa, pero igualmente llena de chispazos de genialidad. Un documento imprescindible para ver cómo se construye un clásico desde sus cimientos.

Un cuento enmarañado y otros problemas de almohada — Lewis Carroll

256 páginas ~5h

Una colección deliciosa donde Carroll juega con el absurdo doméstico: relatos, diálogos, acertijos y situaciones surrealistas que funcionan como pequeñas trampas para el lector. Aquí se aprecia al artesano del lenguaje que convierte lo banal en extravagancia pura.

Cartas inéditas a Mabel Amy Burton — Lewis Carroll

160 páginas ~3h

Un conjunto de misivas donde Carroll despliega su ternura, su ingenio y su peculiar manera de observar el mundo. Las cartas revelan su habilidad para convertir cualquier acontecimiento en un juego verbal o una reflexión inesperada. Un Carroll íntimo, menos teatral, más humano.

Alimentar la mente — Lewis Carroll

112 páginas ~2h 10min

Carroll, que siempre jugó con la lógica como si fuera plastilina, reflexiona aquí sobre el verdadero alimento del pensamiento: la curiosidad, la disciplina interior y el juego intelectual. Es un texto breve pero luminoso, donde el autor despliega su visión del aprendizaje como un acto lúdico, casi mágico. Una invitación a entrenar la mente igual que se afila una pluma: con paciencia, precisión y un toque de rebeldía.

Diario de un viaje a Rusia — Lewis Carroll

240 páginas ~4h 30min

Un documento sorprendente: Carroll lejos de Oxford, observando el mundo con la mirada curiosa de un matemático, un escritor y un gran niño. Sus impresiones viajeras mezclan humor inglés, precisión descriptiva y una fascinación casi antropológica por los paisajes y costumbres que encuentra. Un Carroll más terrenal, pero igual de excéntrico.

Matemática demente — Lewis Carroll

192 páginas ~3h 40min

Una obra deliciosa donde Carroll utiliza juegos numéricos, paradojas y humor para mostrar el lado más absurdo de la matemática. No es un manual, ni un tratado: es un teatro mental donde los números se tropiezan, las demostraciones se burlan de sí mismas y el lector descubre que la lógica, a veces, también está dispuesta a reírse. Un viaje a la mente traviesa del autor.

Silvia y Bruno II — Lewis Carroll

368 páginas ~7h

En esta segunda parte Carroll profundiza en la estructura dual de la historia, alternando entre un mundo fantástico de criaturas caprichosas y un mundo real con tensiones muy humanas. Aquí se aprecia su ambición narrativa: humor, crítica social y ternura se entrelazan en una novela que crece en complejidad y emoción. Un Carroll más adulto, más valiente y sorprendentemente melancólico.

Silvia y Bruno I — Lewis Carroll

336 páginas ~6h 30min

La primera parte de esta ambiciosa obra mezcla romance victoriano, reflexión moral y fantasía delirante. Carroll construye dos planos narrativos que se retroalimentan, permitiendo que lo mágico ilumine lo cotidiano y que lo cotidiano dé forma a lo imposible. Una novela audaz que muestra al autor explorando territorios más amplios que los de Alicia, siempre con su marca de ingenio y extrañeza.